Matthew33 y Yeezzus desde la tierra del corrido: Sonora, nos traen su reciente lanzamiento y debut «Bendecido», un tema que engloba al género Corridos Tumbados, acompañados de instrumentistas experimentados, que han trabajado con artistas como Tito Torbellino JR y Natanael Cano, ícono del movimiento tumbado.
La canción “Bendecido” nace de la nostalgia de esas noches de fiesta que todos deseamos que duren para siempre. Con letras que comienzan con «Bendecido, trueno la botella…», esta canción captura la esencia de esos fines de semana inolvidables llenos de buen ambiente, ligues y risas interminables.
La idea surgió después de regresar a la rutina diaria y sentir la falta de la emoción de esas noches. El deseo de conmemorar esas memorias especiales llevó a la creación de esta pista que celebra la diversión y la alegría de esas fiestas pasadas. El sentimiento fiestero y el entusiasmo se extendieron rápidamente a los círculos sociales cercanos, generando un hype emocionante en torno a la canción.
“Bendecido” se convierte en un himno para aquellos que añoran revivir esas noches llenas de diversión y para aquellos que desean crear nuevas memorias inolvidables. La canción nos recuerda que las fiestas pueden ser efímeras, pero los recuerdos perduran para siempre.»
Matthew33 es un proyecto inspirado por uno de los impulsores de los Corridos: Ariel Camacho, una figura clave en la cultura del regional mexicano. En 2019, Matthew33 descubrió los Corridos Tumbados a través de Natanael Cano, y dos años después, lanzó su primera colaboración en este género. La música de Matthew33 refleja las experiencias arraigadas por dos culturas, la mexicana y la norte americana, mostrando un profundo amor por la cultura mexicana. Sus letras narran la historia de una generación que abrazó una nueva era en la música regional mexicana, marcada por temas bélicos y corridos.
Matthew Madrid nació en Long Beach, California, aunque la mayoría de su vida ha residido en Ciudad Obregón, Sonora. Su amor por la música se gestó en la infancia cuando, en una Navidad, recibió un regalo especial, durante un viaje con sus abuelos, pues ellos le obsequiaron una guitarra acústica, lo que avivó su pasión musical.
Fue en la secundaria donde descubrió a Ariel Camacho, y a partir de entonces, floreció su interés por los Corridos. Retomó la guitarra y comenzó a estudiar las secuencias únicas de la música regional mexicana. A los 17 años, se adentró en la composición, creando Corridos basado en sus vivencias y anécdotas con amigos.